Gracias por darme fuerza... Ruth Ortiz


El Parque Elena Moyano «Madre Coraje» congregó en la tarde de ayer a más dos mil personas tras la pancarta «Que no se apague la luz de Ruth y José. Justicia» encabezada por la tía de Ruth Ortiz, madre de los dos pequeños presuntamente asesinados por su padre, José Bretón, el pasado mes de octubre. La manifestación arrancó con el apoyo en primera fila de los padres de Sandra Palo, la joven brutalmente asesinada por un grupo de jóvenes en 2003 en Madrid.

Poco a poco, en torno a las 20.00 horas, la cabecera avanzaba hasta la plaza de Jesús Rescatado ante la mirada de cientos de vecinos que salieron al paso de la manifestación en su bajada hasta los Trinitarios, donde se ofició una misa por sus almas.
Una vez en la plaza, un portavoz de la plataforma «Justicia para Ruth y José», Antonio Santiago, leyó una carta de agradecimiento a los asistentes escrita por la madre de los niños, Ruth Ortiz, en la que aseguraba que estas muestras de apoyo le servían para levantarse una y otra vez hasta que se haga justicia.
De este modo, la madre se sintió arropada por más de dos mil personas que pedían de este modo justicia y recordar que ayer se cumplían 11 meses desde que desaparecieron los menores.
En la emotiva misiva, Ruth aseguraba que «en aquellos momentos que me venga abajo y parezca que la vida se acaba para mí, pensaré en todos vosotros, toda la gente que me apoya». Y eso, repitió, «lo haré una y otra vez, hasta que se haga justicia».

«Energía positiva»

La madre reconoció que estas muestras de cariño le transmiten «tanta energía positiva, haciendo así de mi lucha, vuestra esta lucha» que también los niños Ruth y José «desde donde estén, os lo agradecerán».
En su marcha, la cabecera de la manifestación hizo varias paradas para gritar «asesino» al padre de los niños Ruth y José y pedir para él, en prisión desde el pasado mes de octubre «cadena perpetua».
Por su parte, en unas escuetas declaraciones, la madre de Sandra Palo, María del Mar Bermúdez, aseguraba que ella ya no cree en la Justicia, y que el término «alimañas» se queda pequeño para describir a estos viles asesinos de niños. Además, se repartieron carteles con preguntas que no han quedado clara a la familia materna de los niños respecto a las respuestas y contradicciones presuntamente vertidas por los familiares del único acusado por el asesinato de sus hijos. Este movimiento ciudadano es el primero que se produce tras conocerse los informes de expertos y del Instituto Nacional de Toxicología que concluyen la presencia de restos óseos humanos en la hoguera de la finca de «Las Quemadillas».